Capsule wardrobe o armario cápsula (minimalismo): encuentra tu estilo.
Hay que comprar como ricos para que nos dure como pobres. |
Esta expresión inglesa, poco usada en su versión española, designa un armario pensado en el conjunto y no la prenda, coherente y más bien minimalista. La idea consiste en privilegiar la calidad a la cantidad, encontrar la ropa que realmente os queda bien y que se puede combinar entre sí. El interés es también el poder limitar el número de prendas que poseemos sin alertarnos cada mañana porque nunca tenemos qué colocarnos.
No te eches para atrás, no pienses en los extremos. El término "minimalista" no tiene la misma connotación para todos. Si algunas personas pueden pasar la temporada con una treintena de prendas, no está prohibido unirse al reto con un armario más consecuente. El interés reside ante todo, en que sea coherente. Tu armario no ha de ser una suma de ropas desparejas, de caprichos y compras impulsivas de las que te arrepientes más tarde, si no un conjunto reflexionado de prendas que se combinan las unas con las otras.
Antes de que te escandalices, has de saber que una capsule wardrobe no debe de ser sinónimo de armario triste y el proceso de concepción puede ser divertido. Liberando tu espacio y tu tiempo de lo superfluo, queda lo esencial. Aprenderás a conocerte y encontrarás tu esencia y tu estilo con el que te sentirás segur@ y harás que tu apariencia esté acorde con tu identidad (esto no lo vas a conseguir siguiendo los magazines de moda).
Has de saber que existen muchas formas ir a la moda siendo responsables en nuestro consumo: comprar piezas fabricadas de forma ética o ecológicas, comprar piezas de calidad que guardarás y tendrás ganas de conservar, pedir un vestido prestado a tu hermana o a tu amiga para esa boda a la que has de asistir este año... Hay que reconsiderar la forma de hacer shopping.
Podemos amar la moda sin ser consumidores compulsivos. Solo se necesita disciplina y saberte guiar por ti mism@. Sigue tus propios criterios, tus gustos, tus preferencias y tu estilo de vida. No sigas las formas y los colores impuestos por los últimos desfiles de los grandes modistas.
Podemos amar la moda sin ser consumidores compulsivos. Solo se necesita disciplina y saberte guiar por ti mism@. Sigue tus propios criterios, tus gustos, tus preferencias y tu estilo de vida. No sigas las formas y los colores impuestos por los últimos desfiles de los grandes modistas.
Una capsule wardrobe no es solo algo a la moda para los jóvenes aprendices minimalistas o ecologistas. Tiene verdaderas ventajas para nuestro día a día:
- Nos simplifica la vida y evitamos un estrés inútil : un ropero simple y claro es el mejor medio de evitar angustiarse porque no sabemos cómo vestirnos. Pensando a vuestras ropas y a las asociaciones posibles, reduciendo las opciones, el famoso síndrome de "¡no tengo nada que ponerme!" cuando vuestro armario desborda también desaparece. Ya nos os preguntaréis qué poneos pues tendréis las elecciones predefinidas y ahorraréis así vuestra energía para otras cosas.
- Ganamos tiempo: un guardarropa bien concebido nos permite prepararnos más rápido, hacer las maletas de forma más eficaz, poner menos lavadoras y de pasar menos tiempo en las boutiques para comprar ropa que no nos pondremos.
- Agudizamos la mirada y seleccionamos los objetos con amor y cuidado.
- Aprendemos a conocernos y a llevar lo que mejor nos va y lo que nos hace sentir bien.
- Podremos liberarnos del fast fashion y el consumismo excesivo.
- Ahorramos dinero: según las estadísticas, una mujer se pone solo el 30% de las cosas que tiene en el armario. La capsule wardrobe nos permite no malgastar más nuestro dinero en ropa que no os pondréis nunca (o que solo llevaremos una vez) o que no combina con el resto de nuestro vestuario. Podremos ofrecernos mejores piezas, sin gastar más dinero.
- Contaminamos menos.
Si la aventura de la capsule wardrobe te ha atraído, es conveniente comenzar por una selección de tu vestuario. Saca todas la ropa y accesorios de tu armario y haz inventario. ¿Hay ropa que ya no te pones? (si en total te lo has puesto máximo 2 veces, ha de ir fuera). Es grande, pequeña, ha descolorido, está estropeada... ¿Si la vieses de nuevo en la tienda a día de hoy, la volverías a comprar? Si la respuesta es no, ¿por qué la guardas?. Es el momento de separarte de ellas. Si están en buen estado, dalas y si no, haz trapos o recicla. El método de Marie Kondo puede serte útil para esta tarea.
Si tienes miedo de deshacerte de una parte consecuente de tu armario, guárdalas en otro sitio diferente a tu armario. Mételas en el sótano, por ejemplo y espera 6 meses. Si después de 6 meses (incluso 12, si esto te da calma) no las has echado de menos, entonces podrás separarte de ellas definitivamente. Y sobre todo, no lo tires, toda la ropa y accesorios se reciclan y si está en buen estado, dala o ¡haz una swap party con tus amigos! Si no conoces a nadie a quien pueda aprovechar, hay contenedores para asociaciones, iglesias donde llevar las bolsas...
Una vez hecha la selección, es el momento de constituir tu armario cápsula. Algunos conocimientos de base, como los colores que te van o tu morfología, van a permitirte acertar desde el primer momento. Ahora te digo cómo constituir este armario cápsula:
- Haz una lista de piezas que consideras esenciales.
- Comienza por analizar tu armario actual. Identifica tus piezas preferidas y las que ya no te pones. No guardes la que esté estropeada por mucho que te guste. Recuerda, el secreto de un capsule wardrobe reside en el hecho de poseer menos piezas pero TODAS de CALIDAD (elige las fibras naturales) e IMPECABLES. Es el precio para estar segur@ de tener siempre una presencia fabulosa.
- Separa los altos de los bajos, los vestidos, las chaquetas, los abrigos, los bolsos y los zapatos.
- Luego separa por temporadas: primavera, verano, otoño, invierno. Las que sirvan para dos temporadas, las ponéis a parte.
Para completar tu capsule wardrobe haz una lista de 2 a 5 elementos que te permitan conjuntar tus piezas fétiches de forma coherente. Por ejemplo: tienes muchos vestidos que te gusta llevar, pero solo son para verano, porque son muy frescos. Invierte en 2 ó 3 buenos jerseys o rebecas que te permitan ponértelos también en primavera y en otoño sin pasar frío. Estas nuevas prendas, podréis llevarlas también con unos vaqueros.
Siempre que vayas a comprar algo nuevo, tómate primero el tiempo de comparar por Internet. Si vas a la tienda física y no encuentras nada, no te pasees de nuevo por la tienda, SAL. Tómate tu tiempo en probadores y ante la duda, no compres.
Si ves que tienes mucha ropa que se parece, usa este dato como linea directiva para afirmar tu estilo personal y ajusta en función a tus necesidades.
Cuando hayas acabado de hacer la separación de los montones que vas a guardar por temporada, hazte estas preguntas:
- ¿Son acordes? ¿Combinan bien?
- ¿Cada pieza puede fácilmente conjuntarse con otros elementos en 2 ó 3 outfits diferentes? (hay aplicaciones que te ayudarán como closetspace).
- La ropa de trabajo: si no te vistes igual para trabajar que en los otros momentos, no dudes en hacer este ejercicio en 2 veces. Algunas cosas se pueden llevar para las dos ocasiones pero vuestro vestuario profesional ha de ser coherente. Si como la mayoría de las personas trabajas 5 días seguidos a la semana, prevé ropa que te permita componer 5 conjuntos diferentes teniendo en cuenta que los tienes que lavar entre medias (algunos, como los vaqueros, no tienes que pensar en lavadora, pues se lavan menos) .
Por internet tienes varios retos como Project 333 que propone constituir un guardarropa con 33 elementos (ropa, zapatos y accesorios) que usaremos solo durante 3 meses, es decir, una temporada. Todo lo demás se meterá en un cartón al que no accederemos. Partiendo del principio de que el 80% del tiempo solo usamos 20-30% de la ropa que tenemos, este proyecto tiene por objetivo aprender a ser creativo con un vestuario reducido.
Caroline del blog un-fancy, inspirándose de Projet 333, ha decidido sus propias reglas para la composición de su ropero que tendrá 37 piezas por temporada.
Evidentemente este es el armario de "a diario". A esto hay que añadir ropa interior, pijamas, ropa de deporte (esquí, equitación, natación...), o ropa para ir a pasar el fin de semana al campo.
No estés esperando encontrar la lista perfecta para un armario cápsula porque todos tenemos una vida y una forma de llevarla. Cuando busques inspiración para un armario cápsula, úsalo como una base. Has de encontrar tu estilo, no trates de imitar a nadie.
No estés esperando encontrar la lista perfecta para un armario cápsula porque todos tenemos una vida y una forma de llevarla. Cuando busques inspiración para un armario cápsula, úsalo como una base. Has de encontrar tu estilo, no trates de imitar a nadie.
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